Coincidiendo con la fecha en
la que se cumplía el 76º aniversario de su fusilamiento, la Sociedad
Cultural Altaffaylla organizó ayer en Tafalla un sencillo y emotivo
homenaje a Emilio Arregui Irisarri, colocando una placa en la casa donde
nació este vecino, en la calle Misericordia, en un acto al que
asistieron varios de sus descendientes. Emilio Arregui se distinguió por
ser uno de los pioneros, en el año 1931, de la creación de la
Agrupación Socialista de Tafalla. Dos años más tarde fundó y presidió
las Juventudes Socialistas en la localidad y en 1936 impulsó el Socorro
Rojo Internacional. De profesión barbero, fue asesinado el 11 de agosto
de 1936.
Junto a los familiares, estuvieron presentes varios ediles de
Bildu y del PSN, miembros del comité local de esta última formación,
representantes de Altaffaylla, un grupo de txistularis, el Coro Baigorri
y varias decenas de vecinos. En nombre de Altaffaylla intervino José
Mari Esparza, quien tras recordar a los más de 3.000 fusilados en
Navarra durante la Guerra Civil, señaló que "con ellos fusilaron a la
República y una esperanza de una sociedad más justa e igualitaria, los
avances puestos en marcha en aquellos años, la democracia, la libertad y
los derechos de los pueblos a ser libres".
En
nombre de la familia del homenajeado, intervino Daniel Arregui,
concejal de Bildu en Tafalla, para agradecer la iniciativa del homenaje,
que supone "ayudar a recordar y conocer más y mejor" a su antecesor, un
hermano de su abuelo, "a quien mataron por defender sus ideales", dijo
emocionado, antes de terminar con un "¡Viva los Arregui!, ¡Aupa el
Aguazón! y ¡Viva la República!". También dirigió unas breves palabras el
concejal socialista David Cabrero, para recordar a los asesinados "que
fueron un ejemplo de vida y compromiso social" y animó a todos a "seguir
trabajando por los mismos ideales que ellos tuvieron".
Posteriormente, otros familiares descubrieron la placa
colocada en la fachada de la vivienda, que estaba engalanada en sus
ventanas con las banderas de Navarra, la republicana y la ikurriña,
además de una fotografía de Emilio Arregui, mientras los txistularis
entonaban el Agur Jaunak. El acto concluyó con la actuación del
cantautor Fermín Balentzia, el baile de un aurresku y el canto de la
Internacional en euskera a cargo del Coro Baigorri. La familia ofreció
un aperitivo a todos los asistentes.
Diario de Noticias
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