Al preso de ETA Iosu Uribetxebarria Bolinaga,
enfermo de cáncer, y por requerimiento de las víctimas del terrorismo solicitan
al juez José Luis Castro, juez de Vigilancia Penitenciaria, a instancias de la
fiscalía, una opinión alternativa a la emitida por Osakidetza; los forenses
concluyen que la situación es de "estancamiento del proceso
oncológico" y que persisten las lesiones ya conocidas, por lo que su
estado sigue siendo "grave e incurable".
Y tirando de hemeroteca
se podían haber pedido, de paso, al juez sobre el estado de salud de Enrique
Rodríguez Galindo, exgeneral de la Guardia Civil, condecorado con 13 cruces de
oro y plata, medallas y encomiendas varias, condenado a 71 años de prisión por
el secuestro y asesinato de Lasa y Zabala, ascendido de comandante a general
mientras todo aquello ocurría. Cumplió tan solo cuatro años y medio de prisión,
siendo excarcelado por razones de salud.
José Barrionuevo,
exministro; Rafael Vera, exsecretario de Estado para la Seguridad; José Amedo,
exsubcomisario de Policía.
La lista de este club
sigue con Julen Elgorriaga, ex gobernador civil de Gipuzkoa, condenado a 71
años de prisión por el secuestro y asesinato de Lasa y Zabala. Su estancia en
la cárcel no duró dos años, quedando libre por motivos de salud; Julián
Sancristóbal, ex gobernador civil de Bizkaia, condenado por secuestro y
malversación a 10 años de prisión y 12 de inhabilitación, cumpliendo tan solo
15 meses.
Y hay más: Ricardo
García Damborenea, Michel Domínguez, Miguel Planchuelo, Ángel Vaquero,
etcetera. Según los tribunales que juzgaron todo lo anterior, los GAL y toda la
trama de la guerra sucia no constituyeron banda terrorista alguna. Los
secuestros, tortura y muerte de Lasa y Zabala fueron un hecho puntual, sin
relación alguna con los crímenes de este grupo.
Todos están muy
arrepentidos y todos ellos pidieron perdón a las víctimas.
Pedro Mari Usandizaga (en Diario de Noticias)
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